
Las casas y módulos prefabricados que hemos mostrado en este sitio son en su mayoría viviendas al uso en la que cualquier familia puede entrar a vivir, igual de confortables que las casas tradicionales.
Sin embargo, existen también otros modelos alternativos, más pequeños, que pueden servir como trasteros, cabañas de jardín y muchos usos más.
Son módulos más simples pero igualmente útiles como “habitación alternativa”, sobre todo para colocarlo en el jardín, donde pueden dar un uso excelente.
Desde una cabaña para los juegos de los niños o para montar un estudio de escritura, música, etc..
Alejado del ruido de la casa hasta un simple trastero donde podamos guardar las cosas que no estemos utilizando en ese momento.
Sin que ocupen lugar en la casa, y en un sitio seguro y resguardado, dentro de nuestros propios terrenos.
Los módulos prefabricados de madera son excelentes para estas funciones, y suelen ser bastante baratos comparados con el precio de las casas prefabricadas completas.
Una solución segura y económica si buscamos nuevos espacios en nuestro suelo.
Las alternativas que ofrecen las empresas de construcción de casas prefabricadas a este respecto son casi infinitas.
Por supuesto, disponen normalmente de un gran catálogo de modelos ya diseñados, con diferentes estilos y tamaños, entre los que podemos elegir.
Pero también pueden adaptarse a cualquier cosa que el cliente pida o necesite, pudiendo crear una pequeña casa en el jardín a nuestro entero gusto para utilizarla como mejor nos parezca.
Los materiales que se utilizan suelen ser los mismos que a la hora de construir una casa prefabricada más grande, es decir, madera, PVC, etc…
El tratamiento y la calidad de estos materiales nos aseguran la viabilidad del proyecto y la durabilidad de nuestra pequeña cabaña de jardín.
Siempre que le demos el cuidado necesario, que no suele ser excesivo, sobre todo si no vivimos en una zona con el clima demasiado extremo.